Prensa Juegos Intercolegiados
Por sus manos han pasado jugadores que ya han tocado las puertas de la selección de Colombia. Su propósito, ahora, es incentivar a más niñas, niños y jóvenes para que practiquen este deporte.
Ángel Romero sobresale entre los más de 500 deportistas y entrenadores que ocupan las canchas de la Ciudadela Deportiva Ramiro Echeverry, de Palmira. Mide 2.05 metros, tiene acento español, es de tez blanca y sus manos son tan grandes como sus pies, pues calza 50 y le toca comprar zapatos en Amazon, porque en las tiendas no los consigue.
Romero es el entrenador del equipo juvenil masculino de balonmano de Antioquia que participa en la final nacional 2022 de los Intercolegiados. Nació en Valencia, España, hace 38 años y desde hace seis vive en Medellín.
Desde que pisó estas tierras se ha dedicado a formar a niñas, niños y jóvenes del Colegio Corazonistas, que confió en él para este propósito. Sin embargo, su trabajo ya es reconocido y hasta trascendió las fronteras de Antioquia, pues profesores de otros departamentos lo han llamado para que los oriente y les eche una mano, como él mismo dice.
Durante 17 años jugó, profesionalmente, balonmano con equipos de su país. Primero lo hizo en el Valencia, donde debutó con 16 años, y luego pasó por Logroño, Valladolid y Ciudad Real, que es como el Real Madrid, si se compara con el fútbol. Fue convocado en más de ocho ocasiones a la selección de España y terminó su carrera en un equipo de Austria, un país pequeño del centro de Europa en donde tuvo que aprender a hablar alemán.
Enamorado de los valles y las montañas colombianas, este exjugador español, ahora devenido a entrenador, tiene el firme propósito, si se lo permiten, de aportar su granito de arena para que el balonmano crezca en nuestro país, pues, según dice, hay talento de sobra, pero requiere de más apoyo y masificación.
¿Qué lo trajo a Colombia?
Mis suegros llegaron en 2010 por temas laborales y luego, en 2017, mi esposa tuvo una oportunidad laboral y vinimos para acá por eso. Ese momento coincidió con el final de mi carrera. Siempre digo que el deporte profesional no es bueno para la salud, es mucha carga de golpes, lesiones, partidos y viajes. Es un deporte de mucho contacto.
Y consiguió empleo rápido como entrenador ??
Sí, tuve la suerte de poder ejercer en lo que me he dedicado toda la vida, y por eso le agradezco mucho al Colegio Corazonistas por darme esa posibilidad. Han sido 17 años jugando profesionalmente y ahora estamos desde el otro lado del campo, intentando transmitirles a los chicos toda la experiencia que llevo. Con el deporte los desviamos de los malos hábitos y gracias a él, se motivan a estudiar. Les sacas de cosas raras.
¿Tenemos talento para el balonmano?
El talento que hay es impresionante. Me quedo alucinado con los físicos. Hay unos chicos, unas chicas con una altura, una resistencia y una fuerza innata tremendas. Ya tienen el físico, es cuestión de mejorar la técnica. Son diamantes que hay que pulir y aquí hay muchos. Hay colombianos que están triunfando afuera. Están Jesús Hurtado, de aquí del Valle, juega en Oporto y le está yendo fenomenal; Santiago Mosquera, de Medellín, está en Rumania ahora mismo, Sebastián Restrepo... Son jugadores que tienen un físico, que cuando llegan, sorprenden porque tienen una fuerza que allá no hay.
¿Y cómo estamos parados frente a otros países, cuál es su diagnostico de lo que ha podido ver?
Hay un problema de masificación, hay que promocionarlo más. Tenemos que formar a más niños, eso es lo que realmente hace falta. Para balonmano se requiere altura, es verdad, pero no es algo obligatorio. Hay jugadores que no son muy altos, pero tienen muchísima calidad y están en Europa, jugando en selecciones de Dinamarca, Francia, Hungría. La invitación que le hago a los ??profes?? es que no se rindan e intenten desarrollar este deporte, que es muy completo: usas cabeza, brazos, piernas y es la mejor manera de alejar a las niñas y niños de malos caminos.
¿Es cierto que lo han llamado entrenadores de otros departamentos?
Muchos compañeros me conocen de las participaciones que hemos tenido, ya alguno de otro departamento me ha dicho ??¿podrías venir a echar una mano???. Estoy aquí para ayudar en todo lo que se pueda, en todo lo que me dejen. Aquí tienen a un ??profe?? que toda esa experiencia que ha tenido va a estar a disposición del que necesite.
¿Cuáles son sus expectativas con este equipo de Antioquia en los Intercolegiados?
Son altas. Acá tenemos a tres chicos muy buenos y algunos han tocado las puertas de la Selección Colombia, como Martín Montoya, Emanuel Gallego y Jerónimo Flórez. Como ves, no son muy altos, pero tienen una calidad individual muy pulida, saben jugar en equipo y son líderes, que es algo muy importante para este deporte. Seguro si los ven en video en Europa, se los llevan.
¿Qué opinión tiene de los Intercolegiados?
Esta es mi primera participación y el trato ha sido muy bueno, la verdad que da gusto. Que los chicos puedan competir con otros departamentos es muy productivo para ellos, es una experiencia inolvidable, por eso agradezco, también, al Ministerio del Deporte por la oportunidad que nos están dando de participar en esta final nacional. Ojalá sigan fortaleciendo este programa.