Paula Alejandra proyecta su futuro en la gimnasia del Programa Supérate Intercolegiados
Prensa Supérate Intercolegiados
Su elegancia, glamour, estilo y técnica denotan los años que le ha entregado a la gimnasia artística. Y a la hora de pisar la lona, la armonía corporal y espiritual son las claves para sus impecables presentaciones.
Si hay algo que resaltar entre tantos valores del Programa Supérate Intercolegiados es la unión familiar. Y ha sido el deporte el mejor vehículo para lograrlo, como ocurre en la familia Rojas Veloza, una muestra evidente de lo que pesa el amor y la compañía en los logros de un deportista.
"Siempre acompañamos a nuestra hija Paula Alejandra. Cuando las competencias son por fuera de Bogotá hacemos todo lo posible por viajar para apoyarla y que sienta nuestro respaldo", comentan casi al unísono Ángela Rojas y Gustavo Veloza, padres de la gimnasta.
Durante la rutina de Paula, la concentración es absoluta. En las gradas su familia se comporta igual. La tensión y el nerviosismo siempre está a la orden del día, eso sí, jamás se pierde la confianza. Cuando hay un error, la deportista no puede evitar mirar a sus familiares para pedir un consejo o simplemente llenarse de motivación.
"Ellos son fundamentales en mi vida, por eso todo mi esfuerzo y dedicación es para ellos. La familia es esencial para lograr los sueños" indicó Paula Alejandra, participante en la gimnasia artística de Supérate Intercolegiados, que cursa séptimo grado en el colegio Pablo VI de Bogotá.
A sus 13 años de edad, esta deportista en proceso de formación tiene muy claro que cuerpo y alma se complementan, por eso quiere estudiar psicología para "ayudar a las personas y darles consejos cuando lo necesiten". Eso sí, con el deporte y la gimnasia como sus fieles compañeros.
Mientras los triunfos y las alegrías siguen brotando del estilizado y flexible cuerpo de Paula, Ángela y Gustavo continuarán aunando esfuerzos para impulsar el sueño de su hija, donde en definitiva la gran ganadora será la familia.
