Su legado en esta disciplina se empezó a escribir desde 1977
Prensa Supérate Intercolegiados
A sus 65 años son muchos los combates que ha presenciado, así como en los que ha participado. Es tranquilo, analítico, técnico. Desde la silla de orientador imparte instrucciones precisas que le han dado fruto a sus dirigidos en el Programa Supérate Intercolegiados.
Gustavo Andrés González es de esas personas que al observarlas inspiran sabiduría. Su cabello largo teñido de canas, sus gafas, cada gesto y la forma de hablar reconfirman esa teoría. Es toda una institución en el taekwondo.
"Vamos paso a paso. En Putumayo este deporte apenas está tomando forma, pero tengo que decir que hay mucho talento. Ojalá nos apoyen en este proceso porque hay muy buen material humano", comenta esperanzado González.
Hasta 1983 sus patadas y puños estuvieron en acción. Años atrás, exactamente en 1977, tomó la decisión de ser orientador. Y así lo ha hecho hasta el día de hoy. Su conocimiento es vasto, tanto que asegura que en poco tiempo alguno de sus dirigidos hará parte de la Selección Colombia de esta disciplina.
Ve con buenos ojos el proceso de los miles de deportistas que participan en Supérate, pues según él es "un semillero de talentos colombianos que en un futuro cercano le darán muchos triunfos al país en diferentes disciplinas".
Espera con paciencia y positivismo que su sueño de conformar la Liga de Taekwondo de Putumayo sea una realidad en poco tiempo, pues en los primeros pasos que han dado él y sus alumnos el panorama invita a seguir adelante sin dudar.
Por ahora, este orientador seguirá entregando su conocimiento y experiencia en los distintos coliseos del Centro de Alto Rendimiento, donde el talento abunda por doquier.