Las diez basquetbolistas del Internado Rural de San Javier-Mitú conforman un equipo que provoca fuertes emociones y elogios. A través de su asistencia en el Regional Llanos las ventanas hacia el Vaupés fueron abiertas.
Quizás no se necesiten estadísticas para tasar el desconocimiento que algunos colombianos tienen con respecto a su país, la falta de conocimiento sin duda es grande. Por ejemplo, ¿qué conocemos acerca de Vaupés?; ¿sabía que en este departamento puede encontrar una diversidad fascinante de fauna y flora, asimismo laberintos subterráneos que esconden deslumbrantes leyendas? Parques naturales sombreados por escalones rocosos que se bañan en corrientes de agua, son uno de los tantos ‘por qué’ catalogan al país como un territorio de extensa biodiversidad. Entre este mágico punto geográfico, específicamente en la comunidad San Javier, se ubica el Internado Rural de San Javier-Mitú.
En medio de la selva y de imponentes paisajes, alrededor de 60 niñas toman sus clases y viven una vida presidida por la tranquilidad. Aquí desde hace tres años un grupo de diez niñas, entre los 12 y 14 años, juegan el basquetbol, un deporte que ellas afirman "es el más popular en la comunidad". Como un trofeo anticipado, por primera vez este grupo toma un avión rumbo al Regional Llanos para disfrutar de los Juegos Supérate Intercolegiados.
Para ellas el español aún es una lengua poco familiar; la mayoría se expresa con confianza en alguno de sus seis idiomas: Cupeo, Piratapuyo, Carapana o Makuna, varias con el riesgo de extinguirse. Es por este último aspecto conversar con ellas no es fácil. En sus rostros se nota una timidez impoluta que asoma el encanto y la autenticidad de personas que son.
Su entrenador, quien lleva solo 8 meses viviendo en Vaupés, le fue asignada hace 15 días la tarea de prepararlas para las competencias deportivas en Yopal, "ha sido difícil porque para ellas es una experiencia nueva y no hemos tenido el tiempo para enfocarnos en los partidos", explica ‘El profe’. Desde que llegó este ‘invitado’ a Vaupés, el caluroso recibimiento no termina. La amabilidad de todos ha sido tan grande que él señala sentirse en casa; "me siento feliz de enseñarles y de disfrutar los elegantes paisajes que tiene esta zona", comenta.
Para este equipo de deportistas, su interés más fuerte es disfrutar junto a sus seres queridos de las tradiciones que enriquecen a su departamento y en glorían al imponente rio Vaupés. El 12 de octubre es un fecha especial, se organizan durante cinco días una fiesta donde todos salen a bailar con atuendos típicos. Este tipo de herencias culturales que se conservan gracias a determinadas sociedades, es una inspiración para Supérate Intercolegiados, programa de Coldeportes, ya que como este equipo deportivo de Mitú, muchos otros niños han encontrado en el deporte una oportunidad para conectarse con nuevas emociones; son estas pequeñas generaciones de colombianos quienes terminarán por encontrarle un espacio a piezas tan fundamentales para cualquier país como: el deporte y las tradiciones.
